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Entérate qué es el hígado graso cuáles son sus causas y como curar el hígado graso y cual es la dieta para limpiar el hígado.
La enfermedad de hígado graso hay que tomarla en serio debido a que puede avanzar y provocar cirrosis y cáncer de hígado.
Conoce cómo tu alimentación actual puede estar causando este problema en el hígado, otras causas de hígado graso y el poder de los antioxidantes y el ejercicio físico para combatirlo.
La enfermedad de hígado graso es la acumulación de grasa en el hígado que no está relacionada con el aumento del consumo de alcohol.
Los ácidos grasos que se utilizan para la formación de triglicéridos en el hígado derivan de la dieta, la síntesis y del tejido graso acumulado en el cuerpo.
Según University of Texas, una dieta típica estadounidense es rica en energía y aporta 100 gr de grasa al día. La grasa aportada por la dieta resulta en la mitad del contenido de triglicéridos en el hígado.
La comida chatarra y frituras son las principales fuentes de grasas y calorías en la dieta, y en muchos casos se ven acompañados no solo por grasas, también harinas y fructosa que predisponen al hígado graso.
Ejemplos de estos alimentos son las hamburguesas, pizzas, tortas.
A su vez una alimentación rica en carbohidratos promueven la síntesis de triglicéridos en el hígado.
Por ejemplo, el jarabe de maíz alto en fructosa se encuentra en variedad de productos envasados como gaseosas, jugos, galletas, cereales y hasta salsas de ensaladas.
A diferencia de la glucosa, la fructosa de este jarabe circulante es absorbida casi completamente por el hígado afectándolo de la misma manera que lo haría un alto consumo de alcohol.
Una dieta alta en fructosa por 6 días puede incrementar 6 veces la síntesis de grasas, la resistencia a la insulina, la cual conduce a mayor acumulación de grasa en el cuerpo y aumenta los triglicéridos.
Es importante también tener en cuenta de evitar el exceso de carbohidratos en tu dieta.
Es por esto que una dieta occidental conduce a enfermedades como las que mencionaremos y luego a la aparición de hígado graso.
Según un estudio realizado en Curtin University, una de las causas del desarrollo y complicación del hígado graso es la deficiencia de colina.
La colina participa en el metabolismo del hígado. Un bajo contenido puede deberse a un consumo pobre de alimentos como verduras como el coliflor, espinacas, semillas de calabaza, berenjenas. (2)
La presencia de un gen PNPLA3 duplica al doble el desarrollo de hígado graso.
Se observó que este gen es prevalente en la población hispana y se asocia con una severidad de hígado graso de 3 veces mayor.
Es por este motivo que las personas hispanas deben cuidar aún más su dieta, evitando los excesos y el estilo de vida para prevenir esta enfermedad.
De acuerdo a Mayo Clinic, la presencia de obesidad abdominal predispone a hígado graso.
Esto se debe a que la presencia de grasa entre los órganos o grasa abdominal cuenta con mayor capacidad para liberar ácidos grasos que son captados por el hígado. (3)
Según Shanghai Jiaotong University la dislipemia, es decir, el aumento de las grasas en sangre afecta negativamente un proceso que se produce en el hígado.
A causa de esto se incrementan los triglicéridos y colesterol malo en el hígado y se reduce el colesterol bueno, lo que conduce a hígado graso. (4)
Otro estudio en University of Bologna, postula que el uso de medicación brinda protección a los diabéticos frente al hígado graso.
De este modo el hígado graso puede formar parte del síndrome metabólico, con la resistencia a la insulina como principal conexión.
De acuerdo a Mayo Clinic, la resistencia a la insulina puede ser consecuencia de la obesidad o diabetes tipo 2 y de ese modo colaborar en el aumento de grasas en las células del hígado, los hepatocitos.
La resistencia a la insulina además puede conducir a un aumento de la producción de sustancias inflamatorios que hacen que el hígado graso progrese. (5)
El hígado graso es considerado actualmente como una característica más del síndrome metabólico en conjunto con la obesidad central, diabetes, dislipemia, hipertensión y enfermedad cardiovascular.
Principalmente la disminución de la sensibilidad a la insulina produce alteración de las grasas, acumulación en el hígado y oxidación que conduce a largo plazo al daño en el hígado. (1) (3) (6)
La pérdida de peso producto de la dieta y el aumento de la actividad física mejora la enfermedad del hígado.
Según Thomas Jefferson University, una cantidad de 5% de grasa en el hígado puede resultar normal, pero un mayor contenido conduce a un aumento del riesgo de hígado graso.
El porcentaje de grasa total en el cuerpo no debería superar el 25% de la masa corporal total en la mujer y el 30% en el hombre adulto, para evitar la acumulación de grasa en los órganos como el hígado. (7)
Valores Normales de grasa corporal (%) según edad y sexo
*American College of Sport medicine
No se aconseja un descenso de peso rápido porque altera al hígado al incrementar la destrucción de grasas.
Si consideramos las causas de desarrollo del hígado graso, una alimentación saludable resulta importante para la prevención de esta enfermedad.
Esto se debe a que predisponen a las enfermedades que causan el hígado graso como dislipemia, diabetes, resistencia a la insulina.
Conjuntamente es necesario aumentar el consumo de granos enteros con moderación y abundante cantidad de frutas y verduras enteras.
Gracias a que esto alimentos poseen un alto aporte de fibra, fitoquímicos y grasas saludables como el omega 3 para la prevención y tratamiento del hígado graso.
Según un estudio en The University of Hong Kong las personas con hígado graso tienen un menor consumo de grasas poliinsaturadas, fibra, vitaminas antioxidantes como la C y E.
La incorporación de alimentos ricos en vitamina E mostró reducir el contenido de grasa en el hígado. (9) (10)
De acuerdo a University of Texa la vitamina E (aceites vegetales) y C (cítricos, verduras de hoja) reducen la inflamación en el hígado lo que evita la progresión del daño del hígado. (11)
Existe evidencia científica que alimentos específicos colaboran con el hígado graso como los siguientes.
Ajo
El consumo de ajo en dietas altas en grasas brinda protección del desarrollo de hígado graso al actuar sobre la vía de una proteína AMPK y así evitar el aumento de las grasas en el cuerpo.
En dietas altas en fructosa, el ajo crudo mejora la resistencia a la insulina y el metabolismo de los lípidos previniendo el hígado graso.
Bayas de Goji y uvas
Las Bayas de goji y uvas contienen resveratrol que brinda protección antiinflamatoria y suprime genes que incrementan las grasas en la sangre evitando el desarrollo de problemas de hígado.
Cardo Mariano
Por su parte el Cardo mariano contiene silibina y silimarina con poder hepatoprotector, antinflamatorio y antioxidante que previenen las complicaciones del hígado graso. (10)
De acuerdo a University of Maryland, la deficiencia de vitamina D es frecuente en el hígado graso y se asocia a la gravedad de la enfermedad.
Es importante elegir Vitamina D3 (colecalciferol) para corregir las enzimas hepáticas incrementadas y el hígado graso, efecto que no se logra solo con la vitamina D.
Dado que la presencia de grasa en los pacientes con hígado graso reduce la absorción dado que esta vitamina es soluble en grasa. (12)
La actividad física no solo colabora al reducir la grasa en el hígado por el descenso de peso, también ayuda al incrementar las mitocondrias en el músculo y aumentar un tipo de fibras tipo I.
Según un estudio en University of Sydney, las recomendaciones para la práctica de ejercicio físico en personas con hígado graso comprenden 20 a 60 minutos de ejercicio rítmico moderado.
Este ejercicio debe incluir los grupos musculares grandes y realizarse al menos 5 días a la semana.
Para prevenir el aumento de peso debe alcanzar entre 150 a 250 minutos a la semana.
A su vez se aconseja un entrenamiento de moderada a alta intensidad al menos 3 días a la semana para mejorar la sensibilidad a la insulina.
Si practicas ejercicio 3 veces a la semana serian 80 minutos o 1 hora y 20 minutos cada día y si se practica 6 días a la semana serian 40 minutos cada día. (13)
Las causas de hígado graso son diversas y suelen presentarse al mismo tiempo como el síndrome metabólico por lo cual el tratamiento natural comprende realizar varios cambios en el estilo de vida en forma conjunta.